jueves, 16 de junio de 2011

...me querrás acompañar?

La libertad comenzaba cuando se unían nuestros cuerpos. La vida se transformaba y todo se desvanecía fuera. Nuestras almas pedían un poco más de tiempo para permanecer allí. ¿Es sólo escapar la solución?
No entiendo como el viento a través de la ventanilla del coche era suficiente para entender que todo podía pasar, también para entender que quizá el momento que esperábamos nunca llegaría… o más bien, que nosotros nunca llegaríamos a ese lugar donde el momento se alarga hasta la eternidad.
Ahora déjame respirar un poco este aire caliente, déjame entornar los ojos para que las luces se desvanezcan. Nuestra vida tomó sentido aquí mismo, pero su continuidad quizá dependa de que dejemos atrás todo aquello que pensamos que tenemos. ¿Me querrás acompañar?
La caja del supermercado no es más que una prisión con barrotes de cristal. Tú quieres volver a sentirte útil, pero no hay más frustración de la que siente que se arrastra en una tierra a la que no pertenece. ¿Te animas a ponerte en pie y navegar junto a mí con la única brújula del corazón?
Voy flotando a la velocidad adecuada, oigo esa música que me ayuda a orientar la brújula de mi libertad. Sigue soñando junto a mí, no dejes que despertemos.
Apaga las luces, oigamos a Tracy una vez más…





1 comentario:

  1. Muy bonito Luisma, y la canción magnífica, me trae muchos recuerdos de mi época estudiantil, un abrazo.

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